LA CORPORACIÓN

CORPORACIÓN DE INVENTORES E INNOVACIÓN TECNOLÓGICA DE CHILE

En 1979 se realizó en la ciudad de Melipilla, auspiciada por Empresas Ariztía la Primera Feria de Inventos de Chile. Este evento se repitió los dos años siguientes y como consecuencia de ello se formó en 1981 la Corporación de Inventores e Innovación Tecnológica de Chile, corporación de derecho privado con Personería Jurídica otorgada por el Ministerio de Justicia por Decreto 1492 del 13 de noviembre de 1981.

Los objetivos de esta Corporación son:

1.- Activar, estimular, acrecentar y resguardar el espíritu inventivo de los chilenos sin distinción de sexo, credo u otro calificativo ajeno al poder de generar inventos.

2.-Convertirse en el centro de atracción y recepción para todas las personas que en nuestro país posean un espíritu inventivo a fin de estructurar su capacidad de intervención en el quehacer nacional y la economía del país

3.-Estar atentos a las leyes y reglamentos que permiten cautelar debidamente las invenciones, ideas e investigaciones y relacionarse con las autoridades para que esta caución sea efectiva.

4.-Divulgar a través de todo el país acerca de cómo las personas dotadas de ingenio inventivo conforman su potencial tecnológico.

5.-Facilitar el contacto y la cooperación entre los asociados generando sedes a lo largo del país.

6.-Unir esfuerzos con toda institución o persona nacional o extranjera que propenda al desarrollo de los inventores de Chile.

7.-Proponer y acoger toda forma de protección internacional para los inventos basándose en la reciprocidad.

8.-Formar departamentos de apoyo para el socio inventor.

9.-Propender a la divulgación de los inventos a través de exposiciones, ferias, muestras, seminarios y otros.

10.-Apoyar a los socios inventores en todo lo que sea posible para que sus inventos sirvan a la comunidad.



La Corporación entra en receso en 1996 hasta que en octubre del 2001 se realiza la IV Feria de Inventos, nuevamente auspiciada por Empresas Ariztía. Mientras se organizaba esta IV Feria, un nuevo grupo de inventores y profesionales buscaban formar una Corporación de Protección de la Propiedad Intelectual. Durante la etapa final de organización de la Feria, ambos grupos coinciden y acuerdan unir esfuerzos y se reinicia la Asociación de Inventores de Chile (ASICH). En el 2003 se acuerda cambiarle en nombre y pasa a ser la actual Corporación de Inventores e Innovación Tecnológica de Chile (CIIT).

Se elige un Directorio conformado por distinguidos inventores, empresarios y profesionales que se traza un programa de trabajo en el mediano plazo. El 2002 es el año del crecimiento interno por la vía de la captación de socios, consolidación de estructuras internas y formación de capítulos regionales. Se designan socios que relacionan a la corporación con las más importantes asociaciones de empresarios como la Corporación de Fomento de la Producción, SOFOFA, la Federación Metropolitana de Industriales y CONUPIA entre otras, e instituciones del sector público relacionadas al tema.

El 2003 es el año de la apertura, por una parte, se crea un programa de apoyo a la difusión y comercialización de los inventos de los socios y por otra parte se genera un programa de servicios, fuera del estado conocido del arte, destinado a las empresas. El 2004 será el año de la apertura internacional. Hoy la corporación cuenta con alrededor de 100 socios todos ellos distinguidos profesionales y empresarios que ejercen sus actividades a lo largo del país. El potencial de la corporación se mostró en la IV Feria de los Inventos para el Desarrollo, realizada en el Centro de Eventos Estación Mapocho en octubre del 2001. En ella se expusieron 174 inventos chilenos y se hicieron múltiples negocios, lo que constituye una muestra de lo que los inventores pueden representar para el desarrollo económico del país.

Luego el año 2006 se organizó la V Feria Internacional de Innovación Tecnológica FIIT 2006, con el apoyo de Fundación Telefónica en el edificio institucional. En este evento expusieron 72 Inventores y participaron también las universidades metropolitanas.

El 2016 un pequeño grupo de socios acuerda asistir a la mayor Feria Internacional de Inventos que se hace en el mundo: INPEX, en Pittsburg, USA. Ese año expusieron 970 Inventores de todo el mundo, inventos que cubren las más diversas áreas y complejidad tecnológica, delegaciones de países como China, Corea del Sur, Taiwán, Rusia; Europa etc. Los Inventores chilenos asistimos a título personal financiando nuestros propios gastos y sin ningún apoyo gubernamental. Luego el 2017 fuimos de nuevo, en las mismas condiciones, con nuestros propios recursos y nos trajimos a Chile un Premio otorgado por la Asociación de Inventores de Checoslovaquia a nuestro socio Sr. Patricio Contreras D. Premio importantísimo porque es un premio “Primo inter pares”, otorgado por la Asociación de Inventores que organiza la segunda exposición de inventos más grande del mundo, la tercera es la organizada por Rusia.

La línea interna, ofrece a los socios los siguientes servicios:

1. Gestión de venta:

Servicio ofrecido a los socios para relacionarlos con empresarios interesados en sus inventos y asesorarlos en su comercialización.

2. Difusión de inventos:

Esta área expone inventos en la web institucional y genera exposiciones y muestras con un doble propósito, por una parte, mostrar los inventos en distintos lugares para fomentar su comercialización y el uso de tecnología nacional y por otra parte estimular la creatividad tanto a nivel de estudiantes como público en general.

3. Capacitación:

La capacitación interna se orienta exclusivamente a los socios y sus invitados, la intención es mantenerlos informados respecto de la legislación vigente y sus cambios, el impacto de los tratados de libre comercio, gestión comercial, ventas y negocios, etc.

4. Apoyo al patentamiento y etapas iniciales:

Esto es dar asistencia técnica y asesoría integral a un inventor que se inicia, a través de otro socio con experiencia y de la misma área de invención, que aporta su experiencia y practica a este inventor que se incorpora al quehacer tecnológico.


La línea externa de asesoría a las empresas, ofrece los siguientes servicios:

1.Concursos de Inventos

La empresa contratante define su área de interés. La corporación elabora las bases y convoca a los inventores del país a un concurso acotado al área o producto de interés de la empresa. Los costos directos del concurso los paga la empresa (Capital de Riesgo). El jurado lo compone una comisión mixta empresa/corporación más un especialista externo en el área. El premio es el desarrollo del invento en condiciones a pactar.

2.Soluciones Singulares

La empresa contratante define el problema a resolver y paga los gastos directos del estudio inicial que genera el servicio (Capital de Riesgo). La corporación a partir de su registro de expertos convoca a un equipo ad hoc. Este equipo genera una solución y un prototipo. La Corporación patenta la solución, si es patentable, a su nombre asociada con los inventores que la crearon. La empresa compra el resultado bajo licencia, un tiempo de exclusividad, la patente, o la opción que mejor se adecue a sus intereses. La ventaja para la empresa es que solo compra un resultado real si efectivamente estima que resuelve el problema planteado.

3.Inspección Innovativa

La empresa acota el área de su proceso productivo que desea optimizar y paga los gastos directos que el servicio genera. La corporación forma un equipo ad hoc de inventores. Este equipo realiza la inspección a la faena a optimizar. El equipo de inventores genera un informe proponiendo medidas de optimización. Se patenta lo que sea patentable, si ha lugar. El costo del informe es similar al de una consultoría si no hay resultados patentables. Si hay patentes se negocia según el esquema del punto anterior.

4. Informe sobre Estado del Arte.

La empresa acota el tema de su interés en forma muy precisa. Inventores entrenados buscan en bases de datos nacionales e internacionales las patentes existentes sobre el tema. Generan un informe que contiene: título del invento, inventor, país y resumen con la descripción de los inventos de última generación que existen en el área de interés del empresario.

5. Up Date para nuevos gerentes y jefaturas

Cuando asume un cargo directivo una persona debe:

conocer y validarse ante sus dependientes.

conocer la operación que asume en profundidad.

proponer una estrategia de trabajo a corto plazo y generar resultados e ingresos para sus principales.

La Corporación cuenta con una metodología, con énfasis en la adaptación del personal a los procesos innovativos, para responder estos cuatro puntos en una semana (cinco sesiones de 3 hrs cada una). El costo para la empresa es similar a una consultoría.

6. Desarrollo de Recursos Humanos compatibles con los objetivos de innovación. Equipo de psicólogos e ingenieros aplican encuestas ad hoc para identificar al personal de la empresa con pensamiento lateral con el propósito de:

a) Capitalizar su capacidad creativa a los fines de la empresa y/o b) Conformar equipos equilibrados de trabajo (entre personal de pensamiento matemático y lateral).

El Directorio está conformado por 7 personas y es asesorado por un Consejo Asesor integrado por consejeros que representan a la Corporación ante instituciones públicas y privadas y asumen tareas específicas relacionadas al tema de su representación.

El Directorio 2018 – 2020 lo conforman:

Presidente: Sr. José Alberto Ochoa Disselkoen
Vicepresidente: Sr. Aldo Bril Goldfarb
Secretario General: Sr. Carlos Hernández Abarca
Tesorero: Sr. Nelson Silva Comte
Director: Sr. Guillermo Paredes Osorio
Director: Sr. Oscar Miranda Naranjo
Director: Sr. Héctor Godoy Muñoz

La Corporación cuenta además con un registro de inventores y profesionales socios, para suplir los servicios ofrecidos a las empresas y apoyar las necesidades de los socios. Este Registro se actualiza anualmente con los socios que ingresan y se interesan por integrar equipos multidisciplinarios creados ad hoc de acuerdo con los requerimientos de las empresas.

LA CORPORACIÓN Y EL PAÍS

El país se ha embarcado en una agresiva política de apertura internacional que se concretó con la firma de los muchos tratados económicos internacionales vigentes. Estos tratados, y los que se firmarán en el futuro, tienen un gran impacto en la economía nacional, con las diferencias propias de las que existen entre las empresas.

En términos generales se puede afirmar que los tratados económicos favorecerán al sector moderno de la economía y afectarán negativamente al sector tradicional. Sin duda habrá diferencias sectoriales, pero de todos modos un gran número de empresas deberán reconsiderar su brecha de mercado, tecnología, mano de obra, administración, etc. También se puede decir en términos generales que la gran y mediana empresa está en general preparada para incorporarse a ellos. Pese a constituir el 4,4% de las empresas del país realizan más del 80% del total de ventas internas y más del 90% de las exportaciones.

Su nivel tecnológico es bueno, su mano de obra tiene un adecuado nivel de capacitación y está continuamente perfeccionándose. Realizan importaciones cuando es necesario para mantener el control del mercado, tienen suficientes fuentes de crédito y no han sido afectados por los ajustes de la economía. Estas empresas, en tanto se mantengan en primera línea y captando innovación, se verán favorecidas por los tratados económicos internacionales tanto en términos de importación como de exportación. Llevan años operando en los mercados internacionales lo que les permitirá capitalizar su experiencia tanto en la comercialización como en el intercambio tecnológico. Su principal fuente de innovación son licenciamientos de países del primer mundo.

Los esfuerzos de apoyo desde el sector público se requieren entonces en el posicionamiento integral del país. Esto es: hacerlo sinónimo de calidad, cumplimiento, no contaminación, belleza, turismo, etc. Esta estrategia puede crear las sinergias internacionales indispensables para la envergadura de la tarea. La pequeña y microempresa están en una situación distinta. Constituyen más del 95% del total de empresas del país y realizan menos del 20% del total de ventas y del 5% del total de exportaciones.

El nivel tecnológico es bastante dispar al interior de cada categoría, pero la media general es baja. La mano de obra está poco capacitada, no realizan importaciones para controlar mercado, sino estrictamente para comercialización interna. Han sido afectadas por los muchos y diversos ajustes económicos y encuentran dificultades para la obtención de capital y crédito. Como no están preparadas para la apertura económica, recibieron todo el impacto de las producciones masivas de los países desarrollados. Algunas por sus condiciones tecnológicas y de productividad competirán poco a poco y seguramente muchas de ellas dejarán de ser viables. Otro sector empresarial es el de la microempresa informal y trabajadores por cuenta propia, según estimaciones de MIDEPLAN, lo conforma más de un millón de personas. Este sector no es sinónimo, pero está asociado a la pobreza, opera sólo en el mercado local, su encadenamiento con el sector exportador es mínimo e irrelevante, el nivel tecnológico muy bajo, la mano de obra sin capacitación, pocas opciones de crédito y es fuertemente afectado por cualquier ajuste económico. Los nuevos escenarios afectarán duramente el sector informal de la economía a través de su impacto en la pequeña y microempresa, que constituyen su encadenamiento natural con el sector productivo.

Chile ha sido tradicionalmente exportador de materias primas y desde siempre, los Gobiernos han hablado permanentemente de estimular el paso a una segunda fase de exportaciones de productos terminados, e incluso a una tercera fase de exportación de servicios. Sin embargo, pese al crecimiento de rubros como el turismo y la exportación de vinos, fruta y metales, sigue siendo la sumatoria de los productos primarios la cifra mayor. Existe consenso (¿?), por contrapartida, en las ventajas de la venta de productos terminados y servicios especializados. En la exportación masiva de materias primas las grandes empresas, que disponen de capital, mercados, tecnología e infraestructura tienen todas las ventajas y el proceso se refuerza a sí mismo. Cabe hacer notar que el cambio radical que enfrenta la economía chilena, en vez de transformarse en crisis, puede ser capitalizado para llevar al país rápidamente a la post-industrialización. Ello requiere de una voluntad política expresa, mucha tenacidad y capacidad técnica de ejecución. Las empresas estarán y de hecho ya están en un proceso de constante innovación que debe seguir el ritmo frenético de los mercados. Con frecuencia cada vez mayor lo que ayer era, hoy día no. Para que los equipos humanos puedan seguir el ritmo del mercado, las exigencias de cambios tecnológicos e innovación y mantengan la eficiencia, es indispensable buscar la sinergia, la coordinación, la armonía y la compatibilización a estos nuevos desafíos, entre los actores, ello en términos verticales y horizontales.

Nuevamente es posible distinguir el impacto tecnológico por tamaño de empresa. El sector moderno de la economía, gran y mediana empresa, requiere tecnologías que disminuyen costos de producción, generen eficiencias en los procesos y avancen, o mejor aún salten pasos, pero generen nuevos productos en general del mismo giro de la empresa. El sector tradicional, pequeña y microempresa, requiere cambios más radicales, productos innovadores, absolutamente distintos y de gran impacto en el mercado. Requieren además mucha más audacia, puesto que el desarrollo industrial del nuevo producto absorberá todos sus recursos, transformándose en una apuesta comercial de todo o nada. En este contexto, la Corporación de Inventores e Innovación Tecnológica de Chile se percibe a sí misma como un importante potenciador del desarrollo económico del país en un mundo global y con comercio internacional abierto y sin fronteras. Las nuevas tecnologías y mejor aún, los nuevos productos cambian la frontera de producción de una empresa y su lugar en el mercado. Esta es la manera más corta y rápida de reposicionar una empresa no-solo respecto de su segmento habitual de comercio, sino, dependiendo de la innovación, respecto del mercado como un todo. La competencia por bajar los costos de producción, sin duda necesaria, conduce a pequeños aumentos en las utilidades y es una estrategia válida para los productos ya conocidos.

Un nuevo producto en cambio puede modificar radicalmente la cifra de negocios de una empresa, sus utilidades, su valor de venta, etc. Ejemplos hay muchos y todos ellos los conocemos a través de la publicidad y de sus éxitos de venta. Un nuevo producto requiere una combinación de especialidades, un inventor que lo inventa y lo desarrolla, un empresario que lo produce, un publicista que lo marketea y una cadena que lo vende. Esto no es muy diferente de lo que se hace para un producto conocido, pero cuando se trata de un buen producto innovador, los márgenes de utilidad son muy distintos y permiten grandes libertades de acción y beneficios para todos los participantes. La diferencia entre un producto conocido y un producto nuevo radica en los márgenes de utilidad posibles, puesto que el producto innovador no necesita competir por precio cuando realmente innova.

Y es aquí donde busca intervenir la Corporación de Inventores e Innovación Tecnológica de Chile a través de una alianza directa entre inventores y empresarios. Por una parte, venderles servicios especializados como los que se mencionaron en la primera parte de esta exposición y por otra estimular, acercar a los inventores a los empresarios en negocios directos e inmediatos que generen nuevos productos y servicios. Nuevos alimentos deshidratados para consumo humano, nuevas formas de eliminar la basura, nuevas formas de combatir plagas agrícolas, nuevas formas de producir agua potable, nuevos productos para alimentar animales, nuevos filtros descontaminantes, nuevos vehículos, nuevas formas de control remoto, etc. Nuevos procesos, nuevas formas y nuevos productos que amplíen las fronteras de producción, generen empresa, trabajo y país.